Partido Socialista Obrero Español

Estamos en el futuro y acabamos de entrar en el colegio electoral con nuestro carnet en la mano. Con nuestro voto cerrado, y dentro una lista de personas que son un poco de suerte conoces de haberlas visto en la televisión, te cercas con nervios a la urna buscan tu nombre y vas a depositar tus esperanzas en el partido que amas, al que llevas dentro en la pequeña raja de la urna.

Pero volvamos a tres años atrás, empecemos  montando un nuevo escenario para que este voto llegue a nuestro partido, primero no creo en las marcas, en las líneas que marcan una calle, en las líneas que marcan un Barrio, ni un distrito, no  creo en las marcas de una ciudad, ni de una provincia, ni de la región y menos en la de una nación.

Pensareis que estoy loco pero es que creo que vivimos todos en el mismo mundo con los mismos problemas, mas acusados en unos que otros sitios, un día un señor nos engaño y nos asusto con que la globalización eran las multinacionales, el poder, los banqueros, ósea el Dólar, y no nos explicaron que la globalización somos nosotros.

Nosotros los vecinos, los del barrio de la provincia, puedo seguir si queréis pero para que extenderse, nosotros movemos el mundo, no me valen que me encasillen en capitalista, de derechas, monárquico  de Izquierdas, anarquista, no me va que me encasillen en nada si no va por delante un proyecto solidario, no me van los programas que no se cumplen, y en nuestras manos esta cambiar el sistema, un sistema justo donde a quien votes sea tu amigo tu vecino, o el del barrio que conoces, la persona honrada que llevas toda la vida tratando, no me valen las listas cerradas y sobre todo no me valen las caras, me valen las acciones y los discursos, ami me enamoro una imagen de político, me enamoro un nombre con mucho significado. Partido Socialista Obrero Español.

Se dais cuenta de lo que significa, el partido de los obreros de los currantes, me enamoro una cara que difundía una idea, Felipe González, pero con el tiempo me di cuenta que la política es un engaño, porque lo que valía era su discurso, era sus acciones, y no se debe de caer en el voto fácil de una apariencia que se esconde tras un pantalón vaquero y una chaqueta de pana.

Con los años me di cuenta que las acciones deben de proceder y las palabras no se deben olvidar, y nosotros debemos de obligar a los políticos a respetar sus palabras.

Ahora habrá gente de izquierdas arrenpetidas de haberle votado a esta derecha caduca, pero no le echemos mas la culpa a ellos, culpemos a los políticos que no supieron explicar, ni cumplir su proyecto. Culpemos a la imagen deteriorada de los que no se mueven de poltronas y cambiemos con nuestras protestas el mundo.

Como dice el anuncio de Coca Cola, nuestro sitio esta en la calle, luchemos por el partido cambiemos cosas y el voto dentro del futuro del principio se depositara en la urna con una lista echa por hombres y no por nombres, una lista del PSOE.